lunes, 19 de enero de 2009

ENGAÑOS Y MENTIRAS

El dicho dice que se coge a un mentiroso antes que a un cojo,es una verdad como un templo, pero entre los alcohólicos ese sabio refrán no es del todo cierto.
Y es que una persona que esta sumida en una toxicomania es un verdadero maestro en el arte del engaño y de la mentira.
Con esto no estoy insultando ni menospreciando a nadie por llamarle mentiroso, y es que os estoy hablando con todo conocimiento de causa, y es que entre los que seguís regularmente este pequeño pero agradable rincón sabréis que yo mismo soy un alcohólico el cual esta en proceso de rehabilitación y no me escondo en decirlo a los cuatro vientos por que para que una persona que tenga un problema con el alcohol lo primero tiene que ser es sincero consigo mismo y reconocer que tiene un problema con esta droga.
¡SI! habéis leído muy bien, he dicho droga, por que aunque este bien vista y reconocida por la sociedad y encima el estado saque una buena tajada en concepto de impuestos, no deja de ser una de las mas terribles drogas, sus efectos pueden ser tan terribles como los de la cocaína o la heroína.
Porque cuando vais por la calle y veis a un toxico mano seguro que decís : mira ese yonki de mierda, pero en vez de ser un cocainomano o un heroinomano o incluso una persona que se drogue con pastillas nuestra reacción sera distinta a la que si vemos a una persona alcohólica.
Por que nuestros propios pensamientos cambian y siempre dependiendo también del esta tus social del alcohólico, porque claro no es lo mismo ver un indigente tirado en un banco con su cartón de vino barato que si vemos a un señor de traje y corbata y bien cuidado físicamente.
En el primero seguro que pensaremos : mira ese pobre borracho con lo bueno que era, mira como esta por su mala cabeza.
En el segundo seguro que pensaremos: es que a noche se sintió indispuesto y hoy no se encuentra bien.
Los dos tienen el mismo problema con la misma sustancia, las únicas diferencias entre ambos es que uno utiliza una sustancia barata y de baja calidad y el otro no.
También la forma de vestir no es la misma, uno con ropas sacadas de un contenedor o ropero y el otro va vestido de armani.
Los dos seguramente terminaran en el mismo lugar y este no es otro que el cementerio, pero seguro que hasta en el cementerio habrá diferencia, porque mientras el primero acabara en un nicho o en el anatómico forense para que investiguen con él, con el segundo tremiera sus días en una tumba o incluso en un panteón familiar, y es que hasta después de muerto sigue habiendo clases y clases.
Pero es el mismo alcohólico, mentiroso y embaucador, los dos habrán mentido,engañado y hasta incluso robado a sus familiares y amigos si es que les quedan amigos.
Los dos habrán echo falsas promesas de que ellos no han consumido, aunque se haya bebido hasta el agua de los floreros.
Aunque en sus arruinadas cuentas bancarias ya no figuren ni numeros aunque estos sean de color rojo.
Los dos habrán mentido engañado hasta la saciedad, por que si algo tiene un alcohólico es que es una persona que esta dentro de una adicción y sera todo un maestro en el sabio arte del engaño y de la mentira.
BUBÚ

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Bubú, no te fustiges más. Darse con el látigo es bueno un ratito, pero no todo el tiempo.
Mira la parte positiva de tu recaida. has sido capaz de superarla, de contarla y de arrepentirte. Has vuelto a comprobar que tienes muchos amigos y gente que te quiere.
Y sobre todo has aprendido algo más sobre ti mismo, que te permitirá no volver a recaer.
Un fuerte abrazo de tu viejo amigo
Pedro