En la madrugada del pasado lunes al menos 21 personas todas ellas indigentes murieron en un incendio desatado en un albergue en la pequeña localidad polaca de Pomorski.
Aunque todavía se investigan las causas del incendio, todo parece apuntar a que el origen pudo estar debido a un pitillo mal apagado.
Las llamas prendieron rápidamente y se propagaron por todo el edificio, porque la estructura era de madera la cual hizo que las llamas se propagaran rápidamente por todo el edificio atrapando a muchos de los indigentes que a esas horas dormían en dicho albergue.
Yo he vivido durante mucho tiempo en algunos albergues y aunque en la mayoría de ellos están preparados para atajar situaciones como la vivida en este albergue, tambien he de decir que he visto algunos que mas que albergues eran verdaderas pocilgas, sin ningún tipo de medida de seguridad la gente tirada por los suelos mal durmiendo en bancos de madera y en sucias esterillas, por suerte el albergue al que me estoy refiriendo ya ha dejado de existir, y no era otro que el que había bajo la muralla árabe conocido entre los indigentes como el albergue del PADRE ENRIQUE.
También he de decir que en todos los albergues esta prohibido fumar dentro de las habitaciones y que se habilitan estancias especiales para los fumadores, pero en muchas ocasiones son los mismos indigentes los que se saltan a la torera estas medidas de seguridad y fuman tanto en las habitaciones como en los baños sin pensar en el peligro que están corriendo no solo ellos sino el resto de sus compañeros y demás personal que trabaja en los albergues, porque aunque parecca mentira una colilla mal apagada puede prender muy rápidamente y originar una verdadera catástrofe
Pero es que aunque se tengan todas las medidas habidas y por haber muchas veces son los propios indigentes los que tienen la culpa de que ocurran estas desgracias por que son ellos mismos los que se saltan estas y otras normas, muchisimas veces son los propios indigentes los que se tumban en sus camas y se quedan dormidos con el cigarrillo encendido, por suerte estos pequeños despistes no suelen pasar de meras anécdotas y quedarse en pequeñas quemaduras tanto en mantas sabanas mantas o incluso en la ropa del propio indigente, pero en ocasiones como la ocurrida en Polonia esta anécdota se convierte en tragedia simplemente por el despiste o el no temer ganas de salir a fumarse un cigarrillo a las salas o lugares habilitados para ello.
BUBÚ
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