Indigentes y caraduras en la Puerta del Sol

Esta tarde he estado dando una vuelta por el centro, concretamente por la Puerta del Sol y sus alrededores.

Durante el paseo no me ha sorprendido el encontrar a mas de treinta indigentes pidiendo entre las calle de Preciados hasta la Puerta de Sol.

Los había de todas las edades y distintas nacionalidades, el que mas me ha sorprendido es un tipejo que se suele poner a pedir entre la puerta del Sol y la calle de Arenal,.

Este cara dura por que no tiene mas nombre que cara dura, cuando le entra a pedir a la gente le dice con un par de narices que si le pueden comprar un bocadillo o le pueden dar 5€, el tío tiene mas rostro que un concierto de negros (eso de negros con perdón) cantando el oli yu ( no se si se escribe así pero es que mi ingles es como el de la mula Francis.

Lo mas gracioso de este tragaldabas de la indigencia es que tiene un cuerpo como el de chewuaka os acordais de él en la guerra de las galaxias y unas espaldas tipo armario tres cuerpos las cuales le vendrían muy bien si se descargarse varios camiones de sacos de cemento, por que este tipo no creo que sobre pase de los 45 años.

Para completar el disfraz lleva una barba como la de papa Noé para disimular su edad y aparentar mas años, tiene tanta cara el tipo que no se corta lo mas mínimo y siempre que lo he visto el tío tiene a su lado dos o tres botellas de coca-cola de litro, sera que eso de pedir y echarle tanto morro a la vida debe de dar mucha sed.

Mientras a pocos metros de donde se pone a pedir este esperpento vergüenza de todos los indigente podemos encontrar a un pobre chaval con los brazos cortados, este chico si que se merece todo lo que le dan ,aunque si tuviera una buena pensión de invalidez no tendría que estar pidiendo, a pocos metros de este chico se pone una mujer con un problema de enanismo la cual también si tuviera una buena pensión no tendría que estar tirada todo el día pidiendo.

Bueno así podría seguir hasta llegar hasta mas de la treintena de indigentes y cara duras que día a día se ponen a pedir limosna en las inmediaciones de la Puerta del Sol y la plaza del Callao.

Lo mas gracioso de todo esto es que la famosisima calle de Preciados están muchas de las tiendas mas impotentes de Madrid, las cuales con sus elegantisimos escaparates y sus lujosisimos locales chocan de frente con la imagen de indigentes pidiendo a pocos metros de sus establecimientos.

BUBÚ